La Dreamworks sigue dando tumbos por el mundo de la animación, tras abandonar definitivamente las películas en 2D (todos recordamos el sopor del Príncipe de Egipto o Simbad) se pasaron ,aprovechando el tirón Pixar ,al filón 3D , se montaron la franquicia con un insufrible ogro verde que pierde fuelle entrega a entrega (Shrek), convirtiéndose en los scary movies del cine de animación, ahora los tenemos expectantes a ver que tal les va con la segunda parte de Madagascar (...hacia falta repetir la experiencia cuando la primera es mas que insufrible?), preparando el guión para la cuarta parte del ogro y el spin off del gato con botas y claro mientras tanto nos manda de visita a la exótica china, para contar una de estas historias aptas para todos los públicos.
Historia que por otra parte no cuenta nada nuevo, tenemos a un panda (Po) con delirios de grandeza y una panza cervecera considerable (voz de Jack Black) que ,por estas casualidades de la vida, saca la papeleta para ser el elegido de turno.
En fín de estas historias típicas que nos contaba la Disney durante la década de los noventa, que si Aladdin (el mendigo que pasa a ser príncipe), La Bella y la Bestia (la belleza esta en el interior...no llegaron a contar las intimidades de la pareja ...XD) o el Jorobado de NotreDamme (donde el jorobado se queda con la cabra ,mientras que el apuesto capitán de la guardia se queda a la jachonda de rigor). Bueno pues aquí lo mismo, el panda inepto repudiado por el resto de estudiantes, incluso por su maestro (voz Dustin Hoffman) finalmente y sin sorprender sufre una transformación milagrosa y llega a ser maestro de las artes marciales, sus compañeros le adoran y su maestro le tiene algo parecido al afecto....en fin.
Lo mas destacable del film las escenas de acción, un espectáculo para la vista, desde la fuga de prisión del malo de rigor o el entrenamiento de Po (el panda insufrible, acorde al insufrible de su doblador) le añadimos un inicio en falsas dos dimensiones (increible) y ya esta. El resto directamente olvidable, afortunadamente tiene una duración justa para evitar que empieces a estar incomodo en la butaca y ponerte a bostezar.
Aun no comprendo las razones que llevan a contratar a tanto famoso para poner la voz a personajes animados, realmente uno se plantea ver una película por que fulanito o menganita les preste su voz a determinado animalico? Bueno aquí los carteles publicitarios incluyen en letras tamaño gigante “con la voz de Florentino Fernández”, así que rápidamente nos dejamos caer en un cine de VO.
Y visto su resultado en taquilla no se alarmen si en un par de años tenemos secuela.
P.D: si esto es lo mejor que puede hacer la Dreamworks en animación les queda mucho por aprender para llegar a competir con Pixar.
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